lunes, 6 de septiembre de 2010

La percepción de la sociedad uruguaya ante los fenómenos meteorológicos extremos.

Siempre trato de hacerme la idea de que forma piensa la sociedad uruguaya antes los fenómenos meteorológicos extremos, y comienzo este breve artículo con las siguientes preguntas: ¿Quién de nosotros estaría dispuesto a perder un ser querido por no tomar las debidas precauciones ante un robo o un acciden-te?, ¿Porqué no tomamos las precauciones necesarias ante los fenómenos me-teorológicos extremos?, ¿Cuántos uruguayos más estamos dispuestos a perder por no saber que debemos hacer en situaciones peligrosas ante fenómenos me-teorológicos extremos?, ¿Quién debería instruirnos al respecto?.


No pretendo abarcar toda la información existente sobre manejo de riesgos o dar todas las definiciones al respecto, pero si que tengamos en claro de que es-tamos hablando cuando hablamos de: riesgo, amenaza, concientización pública, desastre, mitigación, prevención y vulnerabilidad.

Riesgo: Probabilidad de consecuencias perjudiciales o pérdidas esperadas (muertes, lesiones, propiedad, medios de subsidencia, interrupción de actividad económica o deterioro ambiente) resultado de interacciones entre las amenazas naturales o antropogénicas y condiciones de vulnerabilidad.

Amenaza: evento físico, potencialmente perjudicial, fenómeno y/o actividad humana que puede causar la muerte o lesiones, daños materiales, interrupción de la actividad social y económica o degradación ambiental.

Vulnerabilidad: condiciones determinantes por factores o procesos físicos, so-ciales, económicos y ambientales, que aumentan la susceptibilidad de una co-munidad al impacto de amenazas.

Concientización pública: información a la población en general, tendente a in-crementar los niveles de conciencia de la población respecto a riesgos potencia-les y sobre acciones para reducir su exposición a las amenazas. Las actividades de concientización pública promueven cambios de comportamiento que condu-cen a una cultura de reducción del riesgo. Esto implica información pública, difusión, educación, emisiones radiales y televisivas y el uso de medios impre-sos, así como el establecimiento de centros, redes de información y acciones comunitarias participativas.

Prevención: actividades tendentes a evitar el impacto adverso de amenazas y medios empleados para minimizar los desastres ambientales, tecnológicos y biológicos relacionados con dichas amenazas.

Mitigación: medidas estructurales y no estructurales emprendidas para limitar el impacto adverso de las amenazas naturales, tecnológicas y de la degradación ambiental.

Desastre: interrupción seria del funcionamiento de una comunidad o sociedad que causa pérdidas humanas y/o importantes pérdidas materiales, económicas o ambientales; que exceden la capacidad de la comunidad o sociedad afectada para hacer frente a la situación utilizando sus propios recursos.

Entrando directamente en el tema y teniendo en cuenta las definiciones ante-riormente explicadas, podemos encararlo con suficiente información.

Con la intensión de basarme en datos comprobables y no en conjeturas en este tema, utilice como base para este artículo un elaborado y excelente informe que fue elaborado por la Sociedad Civil “Amigos del Viento” el año pasado, bajo el título “Informe del país Visión de Primera Línea sobre Uruguay”, a continua-ción se detallan algunas de sus conclusiones, recomendaciones y soluciones:

“ Dentro de las consideraciones generales, si bien se ha avanzado y se percibe la existencia de algunas capacidades técnicas instaladas, no se conciben como es-fuerzos sistémicos. El mapeo de amenazas y vulnerabilidades y una efectiva participación social no ha ido mucho más allá de los enunciados….”

“ …. tampoco a habido un acercamiento a las comunidades afectadas de modo de conocer sus prácticas”.

“Se transcriben algunas de las recomendaciones y soluciones planteadas por los propios encuestados:

• “Que la Gestión de Riesgos sea Política de Estado.

• “Destino de fondos y generación de ámbitos reales de participación de la comunidad.

• “Crear la forma de hacer participe a los involucrados en la planificación y la acción de las medidas a tomar. Que la información sea compartida con las comunidades.

• “Creación de comités y grupos de prevención estables, que estén capaci-tados y equipados para dar respuesta en situación de emergencia.

• “Realizar una evaluación a nivel nacional, mapeo de riesgo y reconoci-miento de vulnerabilidades y amenazas desde el conocimiento local.

• “Introducir la temática en asignaturas pertinentes de la educación formal a nivel primario y secundario, utilizar abundante los medios masivos de comunicación para educar, recomendar, prevenir y hacer conocer las responsabilidades legales.

• “Cambios organizacionales que doten de flexibilidad a las organizacio-nes y a la formación de recursos humanos”.

Pero, ¿que pasa cuando la sociedad no tiene la percepción del peligro en su co-munidad?, para contestar esta pregunta se acude a un trabajo bajo el título “Los riesgos y al realidad uruguaya”, donde claramente se expresa:
“La normalidad implica riesgos. “, “La vida es un proceso permanente de inter-acción con el medio; de esta interacción surge la experiencia y de ella el conoci-miento. Mediante un proceso de prueba y error, reflexión y nueva prueba, la sociedad construye una praxis. Mientras la experiencia no es elaborada en la praxis no se transforma en conocimiento. La reflexión sobre los riesgos es parte del proceso de la praxis, pero es diferente la posibilidad de reflexionar sobre riesgos de origen natural o de origen tecnológico. Una población afectada por tormentas costeras o terremotos “sabe” que estos fenómenos sobrevienen a in-tervalos…. “Visto desde este ángulo, un riesgo es un producto de la cultura. Si la sociedad no considera que determinado factor implica riesgos, el riesgo no existe.

“La población depende del concurso de expertos y la palabra de las autoridades”.

Pero, ¿ que pasa cuando los expertos, no son tomados en cuenta por las autori-dades o al sociedad?. Dejo la pregunta para que sea respondida por los lecto-res.

Conclusiones:

La percepción del amenazas depende de la población uruguaya, de que las vea como tales; y que además se puedan tomar acciones al respecto, mediante los conceptos de prevención y concientización pública.

Los expertos en el tema están tomando recaudos al respecto desde hace muchos años, sin haber muchas veces ámbitos adecuados de participación entre estos y las autoridades o la sociedad.

Fuentes:
• Informe elaborado por la Sociedad Civil “Amigos del Viento”, bajo el tí-tulo: “ Informe del país: Visión de Primera Línea sobre Uruguay”, marzo 2009.

• Da Cruz, Jose: “Los riesgos y la realidad uruguaya”, pp. 57 a 82 en “Polí-ticas ambientales en Uruguay”, E. Gudynas (compilador), Coscoroba, Montevideo, 2001.